Ardemos con las luces, así que ven somos jóvenes, la música estalla en mis oídos y me pone más arriba en dirección al cielo... ¿pero y si todo esto nos arrastra a una completa decadencia?¿que harás?, le beso el cuello y solo apuesta por decir que eso fue raro. Tengo Kilos de esos... yo no soy del mundo, SOY el mundo, puse mi alma y mi corazón en mi cerebro y ahora se han prendido en fuego, están ardiendo y me invade una visión pos-apocalíptica de este juego, pero decidimos colgarnos de los sentimientos, afortunadamente sigo aquí, ¿y tú?.
Cuantas oportunidades hemos dejado pasar por miedo a estar allí, es lo mismo que perder lo que esta afuera y olvidar simula ser la mejor droga y una suave conversación persuade mis caminos, me susurra "Corre muchacho, la vida espera por ti", asusta no saber lo que viene y los cigarrillos parecen la mejor compañía, fuma los que quieras igual tienes que apresurarte, solo queda bendecir la lluvia que cae en mi cabeza... es lo único que conseguí.
Lineas blancas y negras que no me llevan a ningún lado, algún día rezaré y mis plegarias serán por mi propia paz mental, pero mientras tanto miremos mis tobillos, ellos han sido testigos al ver a otros caer, y esperan ver morir más fantasías ajenas, cubrí mis oídos y esperé olvidarlo todo pero su Beat vuelve y enceguece mi entendimiento.
Una vez que caminas sobre el agua se oye el vociferar de tus súplicas para no hundirte, pero piénsalo allá abajo hay más historias de las que caben en tu cabeza, tu luna alumbró lo necesario para dejar ver como cercenabas mi cerebro, es una luna que sabemos no vamos a olvidar.
No necesitamos dormir, ya habíamos despertado en la isla de los sueños de plástico, donde puedes conseguir lo que tu quieras, donde puedes conseguirme a mi, hoy no me pondré medias, no te preocupes estos pies aguantan.