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Despierto en un lugar completamente desconocido, es un parque, miro mi teléfono y son las 5:26 am, siento como si el licor de toda la noche escapara a través de mis poros, solo recuerdo las luces de la ciudad y ver como mi mente se pierde en la loma al absorber el veneno... el sintetizador hace resurgir mi cerebro de las lagunas, recuerdo en mis labios el cigarrillo que armé y que abrazó mi mente tan arriba que solo veía una luz esperando la noche, muéstrame
el camino... y un coro en mi cabeza responde: "Tú eres el Camino", pero bailamos para olvidar y caer rendidos ante las tentaciones de la media noche.
Esto puede ser el cielo y puede ser el infierno, aun así el capitán de este viaje no me ha dicho a donde vamos y me dejo llevar sin saber a donde estoy siendo arrastrado, pero ya estamos cerca, nada nos puede parar, ni los recuerdos que bombardean mi paz, recuerdos que mentían y que dejé encerrados en el baúl rojo, esta es la vida real, donde tus miedos atacan por la espalda porque rápido vienen y rápido van, así como esos días en que eramos felices, ¿que pasó con ellos? ¿a donde fueron?... parece que se nos hizo tarde, solo queda mirar como se alejan.
Algo si me quedó claro, decidí no tener pasado para no alcanzar palabras que nunca debí esperar y quedaron estancadas en el filo de la noche, es mejor olvidar para no enceguecer la ilusión, por que descubrí que mi mundo libre esta encerrado en mi cabeza.